Tras algunos artículos sobre relaciones “tóxicas”, realizados a raíz de la publicación de diversos libros sobre esta temática de Bernardo Stamataeas, ahora volvemos a tocar el tema pero, en esta ocasión, debido a la publicación de otro libro, esta vez, un ensayo denominado “Hombres tóxicos” cuya autora es Lillian Glass. Cómo es un hombre “tóxico” Un hombre tóxico es aquel que produce emociones negativas en su pareja, tiene un mal comportamiento con la misma, haciendo que se sienta mal e, incluso, con sentimientos de culpabilidad sin razón aparente lo cual, obviamente, va minando su autoestima.
A veces, caemos en el error de considerar que dicho hombre “debe” ser siempre nuestra pareja cuando esto no es cierto. Puede ser otro familiar o cualquier hombre que, de alguna manera, forme parte de tu vida personal, profesional o social. En todos los casos, lo que se genera entre dicho hombre y tú es una relación disfuncional que sólo causa dolor.
Cómo es una mujer “imán” Te puedes considerar una mujer imán si un hombre te hace sentir tan mal que puedes experimentar cambios emocionales y físicos o emociones como miedo, dudas, sentimiento de culpabilidad o vergüenza. Eso significa que estás con un hombre tóxico.
Lo cierto es que existen mujeres que se implican en relaciones que les acabarán trayendo sufrimiento, tristeza y amargura, que es la forma de vivenciar el amor cuando se haya envuelta en este tipo de relación tóxica. Al final, se convierte casi en una batalla que hay que ganar con una pareja que “te quiere”, eso es lo que dice, pero debe ser muy en el fondo, porque no tiene ningún inconveniente en maltratarte, especialmente, a nivel psicológico.
Y, en contra de lo que pudiera parecer, el perfil más destacado de las mujeres que caen bajo sus “encantos” son aquellas con personalidades maternales y protectoras, o aquellas que ejercen profesiones que se centran en ayudar a otros. Cómo se siente una mujer “imán” tras una relación tóxica
Como tu autoestima está muy baja y seguro que, por mucho que escriba, cuesta sacarse la venda de los ojos, te propongo una serie de preguntas. Tú sólo debes contestar, con total sinceridad, un sí/no y, así, conseguiremos que la verdad salga a flote: ¿Te pones triste cuando piensas en él?
¿Te hace sentir culpable? ¿Cuándo está contigo, te pones de malhumor? ¿Te dice palabras que te duelen y después añade: “Mujer,¡era broma! ¿no te habrás enfadado?” ¿Tiene problemas económicos y te suele pedir dinero? ¿Habla siempre de sí mismo y no te presta mucha atención cuando hablas de ti o de ambos? ¿Habla mal de su última relación así como de otras mujeres de su vida? ¿Tiene asuntos pendientes con su madre o con una familiar femenina? ¿Se debe hacer todo siempre a su manera? ¿Tienes miedo de decir lo que piensas o sientes cuando estás con él? ¿Sientes que empiezas a mostrarte más retraída con la gente?
Si has contestado que SÍ a la mayoría de las preguntas, ya no hay duda: ese hombre que está a tu lado es “tóxico”.
Tipos de hombres “tóxicos”:
1. El competidor superior. Siempre intentará quedar por encima de ti, poniendo en cuestión casi todo lo que puedas decir; te interrumpe tu hilo de conversación, te contradice -aunque no tenga razón- pero, para justificarse hará un largo monólogo con mucha información innecesaria y, a veces, equivocada. ¡Ah! Y tanto en privado… como en público con la típica frase de “¡cállate! Que no sabes de lo que lo hablas”. Esto os conducirá a tener discusiones un día sí y otro también puesto que él no está dispuesto a ceder el control de la relación ya que considera que es superior a ti… o a cualquier otra mujer. Tiene tendencia a la verborrea, con lo cual no es posible interrumpirle por tu parte.Su lenguaje no verbal le delata ya suele inclinarse en exceso hacia la otra persona, de manera, que llega a invadir la zona íntima de la misma, espacio en el cual no se puede entrar sin permiso. Es claramente observable su tendencia a coger a la mujer del codo por varias razones: para indicarle que se calle o que ni se te ocurra volverle a interrumpir.
2. El volcán pasivo-agresivo aparentemente tranquilo, pero que puede entrar en erupción. Es un hombre que puede estar triste, alegre o enfadado, pero no lo te darás cuentas porque se lo traga todo hasta que está lleno y explota. Pero, pasa de hacerte sentir la mujer más feliz del mundo a la victima de sus críticas, ironías y sarcasmos lo cual provocará que acabes desconfiando de él. De hecho, estos hombres son un imán para mujeres “tóxicas”, que también las hay, como la narcisista egocéntrica. En este caso, son ellos los que buscan el halago y el contacto físico por parte de las mujeres.
3. El sabelotodo presuntuoso. Hombre presuntuoso, cree que tiene todas las respuestas y, por tanto, si se te ocurre dar alguna contestación su frase favorita es “¿estás segura?” Su comportamiento es ofensivo, con desprecios constantes y conducta paternalista hacia su pareja. Habla lento, en forma de monólogo puesto que nunca hablará contigo sino consigo mismo ya que está encantado de haberse conocido. Si en alguna ocasión se te ocurre enfrentarte a él, se mostrará impaciente, poniendo los brazos en jarras… para que quede claro quién tiene la última palabra.
4. El mentiroso seductor, infiel. Hombre muy halagador y cortés, quizás, en exceso, lo cual producirá que inicialmente no le creas ¡qué bien haces! Sin embargo, si tenemos a un hombre al lado que está alimentando constantemente nuestro ego, hablando bajito, suave y lento, acabarás atrapada en sus redes. Una vez cerca, es más que probable que se dedique a flirtear con otras chicas a la vez. Pero, si le dices que deje de hacerlo, ¡cuidado! Porque él no tendrá ningún inconveniente en girar la tortilla y acabar convenciéndote de que eres tú la que flirtea. Si no te dejas persuadir, una de las señales más claras de que te engaña la obtendrás cuando le oigas carraspear o un chirrido, al acabar la frase.
5. El obseso del control, agresivo. Es el tipo de hombre realmente “tóxico”, que te controla y te dice tanto todo lo que debes como lo que no debes hacer de una forma intimidatoria, usando para ello la agresividad. De manera que si no haces lo que quiere y cuando él desea, todavía puede mostrarse más agresivo. Busca claramente la confrontación verbal contigo ya que “estás conmigo o contra mí”. Si le desafías, habrá una discusión con gritos y tono de voz elevada y tú te sentirás, constantemente, juzgada. “ No, eso no está bien.¿ Es que no me escuchas cuándo te digo cómo hacer las cosas?”.
6. El manipulador traidor. Este hombre mete sus narices en todos tus asuntos privados como si fueran suyos para conseguir que tú hagas las cosas a su manera con lo cual, a la larga, acabaría teniendo el control de la situación. Para ello, te da su opinión acerca de “lo mal” que lo estás haciendo -por cierto, opinión que no has pedido- de manera que acaba dándole la vuelta a lo que has dicho o hecho hasta ponerlo en tu contra. A nivel de lenguaje no verbal (CNV), una de sus características es señalar con el dedo.
7. El víctima negativista. Este hombre ve la vida como un vaso medio vacío de modo que siempre ve la parte negativa, en lugar de la positiva y espera lo peor. De esta manera, por si las cosas le van bien, intentará sabotearlas. En el fondo, la razón es el dolor emocional que acarrea de etapas anteriores y que le producen una baja autoestima. Esto hace que crea que vuestra relación no va a funcionar- aunque no haya motivos objetivos para creerlo- con lo que te dirá palabras que te producirán dolor e iniciaran una discusión, día sí y día, también. En cuanto a la CNV, son gestos comunes de esta tipología de hombres, mover sin parar los pies o cruzar y descruzar las piernas.
8. El indeciso, irritante y sin iniciativa. Es un hombre que no es capaz de tomar ningún tipo de decisión en su vida con lo cual se ve arrastrado por las decisiones de los otros. Esto produce que tenga miedo a vivir y, por tanto, a crear conflictos. En este caso, si considera que una conversación puede ser incómoda, se mantendrá al margen, aunque la misma sea con su pareja. Y esto es lo que hace que sea irritante y, en ocasiones, ofensivo, porque te puede dejar con la palabra en la boca “ por si…”
9. El narcicista egocéntrico. Su principal y, de hecho, única preocupación es él mismo ya que se considera el centro del universo y espera que tú le consideres igualmente. De ti, no le importa mucho, sólo aquello que tenga que ver, directamente, con él. Es difícil mantener una conversación con él porque no le importa, realmente, lo que digas ni respondas. Seguirá hablando hasta que acabe con lo que quería decir, obviamente, siempre sobre o acerca de él. Se suele sentir atraído por mujeres vulnerables ya que es más fácil sentirse superior, y después maltratarla con frases como “ Si no fuera por mí, no serías nada” o “Sin mí, estarías enla calle” seguidos de frases que ponen de manifiesto lo inútil que eres y lo agradecida que deberías sentirte porque él “te rescató”.
10. El frío emocionalmente. Este hombre es de muy pocas palabras, casi nunca sabes lo que piensa o siente, si es que tiene alguna emoción.Por tanto, siempre deberás jugar a adivinar “lo que piensa”- como si fuera posible- con lo cual estarás siempre insegura. Por cierto, no te hagas ilusiones: no va a cambiar con el tiempo.
11. El sociópata. Es el hombre más tóxico y peligroso y te puede causar un gran daño. Suele producir una gran primera impresión ya que te dice todo lo que quieres oír. Seguramente, te preguntará qué te gusta, qué te hace feliz, qué te entristece… irá directo a tus emociones, cuestión que él desconoce ya que un sociópata no posee. Sin embargo, no tendrá ningún reparo en mentirte para conseguir lo que quiere. Si estás atenta, te darás cuenta que estas ante este perfil porque se contradice más de una vez en una misma frase.
La relación más tóxica de todas es aquella en la que alguien da más que la otra persona. Aquella donde una persona espera más de la otra, sin que esa igualdad de respeto mutuo y sentimientos se produzca.
Mujeres “imanes” para hombres “tóxicos”:
1. Soy la única que puedo domar a este chico malo. Son mujeres que consideran que son las únicas que pueden conseguir cambiar a los hombres “tóxicos” aunque suelen equivocarse.
2. Mi amor es demasiado intenso. Mujeres que consideran que su no hay comparación entre el amor que profesan al hombre y los rasgos “tóxicos” de esté, por lo cual no le quedará más remedio que cambiar… ¡cuidado! Ya hemos visto que algunos no van a cambiar nunca.
3. Puedo arreglar cualquier problema. Son mujeres que suelen tener mucho éxito en su vida profesional y por tanto creen, erróneamente, que lo mismo se puede trasladar a su vida persona.
4. Es mi príncipe azul. La mujer considera que su valía depende de haber encontrado al hombre que simboliza su “príncipe azul”, por lo cual cae con mucha más facilidad en las garras de un hombre tóxico.
5. No voy a desperdiciar la última oportunidad de encontrar el amor. Hay muchas mujeres “desesperadas” por encontrar a una pareja o para que no se les ponga la etiqueta de “solteronas” y, por ello, son capaces de soportar cualquier cosa, pero, reflexionemos ¿qué es mejor?
6. ¡Pobre hombre, me da pena! Suelen ser mujeres con rasgos de cuidadoras o protectoras o dedicadas a profesiones de ayuda al otro.
7. No me fío de mi instinto. Son las mujeres que, aunque saben que hay algo que no va bien, no se fían de su propio instinto.
8. Histriónicas. Mujeres que caen en manos de hombres “tóxicos” debido a su tendencia a la dramatización.
9. Miedo al miedo: Mujeres que, al encontrarse ante un hombre potencialmente violento, obedecen a pesar de que, en el fondo, no quieren.
10. Si tu pareja se enfada, es que le importas de verdad: Una parte de mujeres opinan que la violencia por parte de los hombre demuestra cuánto deben quererlas… aunque, ¡claro! Cuando se tiene la voluntad secuestrada, una puede decir cosas que no piensa de verdad.
Cómo curarse de un hombre “tóxico” Pide ayuda profesional a un psicólogo especializado, lo antes posible. No sufras en silencio: pide ayuda a tus familiares y amigos, asegurándote siempre de que las personas en las que confías, saben guardar confidencialidad. Distráete: sal a comer, a darte un masaje o a divertirte, la cuestión es mantener la mente ocupada. Haz cambios en la decoración. Rodéate de color azul (paz y tranquilidad), malva (relajación total), amarillo (activación, energía). Cómprate una mascota. Especialmente, un perro. Tienen un poder terapéutico increíble. Lleva un diario emocional. Cada día debes escribir todas tus emociones y sentimientos, lo que te pasa por la cabeza en estos momentos…ya verás qué mágico es cuando mires hacia atrás. Tu terapeuta te ayudará y te dará las indicaciones oportunas. Ríete cada día, en buena compañía. Haz algo que siempre quisiste hacer y lo ibas dejando.
Sí, existen mujeres que viven atraídas por los “hombres tóxicos”, hombres que son mujeriegos, coquetos, violentos, maltratadores y con alguna adicción peligrosa… Mujer, la vida es bella, si así la quieres vivir. Tú naciste para ser amada, naciste para caminar por el mundo con la frente en alto. Mírate al espejo y deja que tu mirada te demuestre la valentía que llevas en tu interior. Piensa que la vida no es sólo dejar que otros decidan por ti sino que tú eres la que tiene que cambiar de actitud, luchar por tus ideales y sueños. Si has caído sólo recuerda al ave fénix que resurgió de entre las cenizas y emprendió el vuelo. Si te encuentras en esta situación similar o conoces a alguien que atraviese por alguna parecida, buscas a un psicólogo especializado en autoestima, motivación, crear seguridad, eliminar miedos, no dudes en consultar con un profesional del Gabinete AG.